• Gestionar, se puede gestionar de muchas maneras. Se puede hacer de tantas formas como profesionales somos. Unos seguimos unas teorías, otros otras y hasta algunos no siguen ninguna.

    Se puede planificar de muchas formas y de la misma manera podemos conducirnos en el día a día, paso a paso, mirando la paja, en lugar de mirar al grano.

  • Parece sorprendente pero al analizar hacia donde dirigen su mirada los mandos intermedios de la enfermería, llama la atención como los aspectos dirigidos a la investigación, son los que menos interés despiertan sobre este sector de la gestión enfermera. De hecho el desarrollo de estas competencias investigadoras son a las que menor importancia se le da, siendo por tanto una de las necesidades sentidas menos apreciables en este colectivo de la enfermería.

  • Este periodo "vacacional" que atravesamos, parece que no invita a realizar artículos con demasiada carga de profundidad, debido a que todos en una medida u otra andamos dispersos en cuestiones más intimas y personales y donde los metapensamientos gestores pasan a un segundo plano.

  • Es interesante conocer los motivos que nos inducen a los profesionales a aceptar un ascenso, supervisor de enfermería, jefe de sección médica, jefe de servicio médico, supervisor de área, etc. Cada una de las personas puede tener un motivo y una razón para cambiar su puesto de trabajo y promocionar.

  • No es un tema que hayamos tratado demasiado el de las retribuciones. No es que no sea importante, pero bien es cierto que las retribuciones tiene un carácter estructural, refiriéndose con lo de estructural, a que es algo que no depende por suerte o por desgracia a la gestión directa dentro de la propia organización y si depende la macro gestión en los gobiernos centrales u autonómicos. Pero, ¿hasta que punto nos importa lo que cobramos?, ¿hasta que punto son importantes las retribuciones y su diseño?