Un hospital centrado en personas debe partir del conocimiento, del pensamiento y expectativas de las personas sobre su hospital de referencia, que expectativas, qué nivel de servicio, hasta dónde debe llegar el grado de atención, cómo debe ser esta, etc.
La involución de la pirámide poblacional es otro de los hechos, que poca discusión o debate admiten, ya que son reconocidos por todas las partes implicadas en el proceso sanitario.
Esta involución es la que ha generado que los costes derivados de la atención a las personas mayores se hayan multiplicado, convirtiéndose en el verdadero problema y talón de Aquiles del sistema sanitario, dado que han elevado el gasto público de los servicios que deben dar soporte y cobertura a esta población. Esto es motivado, por el actual estado de la ciencia médica y del cuidado en el que han conseguido, que lo que hasta ahora podíamos considerar procesos de salud irresolubles, se conviertan en procesos de salud crónicos.
El artículo “Un nuevo sistema Sanitario: El falso debate entre sostenibilidad y el negocio”, se trata de un editorial donde el autor debate sobre el tema de la sostenibilidad del sistema sanitario.
La reflexión está centrada en el marco de la sanidad de Castilla-La Mancha, donde los llamados “recortes” presupuestarios en sanidad y establecimiento de conciertos abanderó un cambio de política en la región. Plantea, si el debate de la sostenibilidad, es un debate forzado o realmente hay datos que avalen y nos hagan plantearnos si realmente hay un problema con la sostenibilidad del sistema.
Las tecnologías digitales han transformado casi todos los aspectos de nuestra vida. La digitalización ha revolucionado el modo de enfrentarnos al proceso salud-enfermedad tanto a los profesionales de la salud como a los propios pacientes.
Si bien es cierto que, muchos de nosotros aún no hemos mejorado ninguna de nuestras habilidades, para adaptarnos convenientemente a este cambio de paradigma.
La actualidad sanitaria diaria habla de innovación, de la necesidad de los profesionales de tomar el mando, responsabilizarnos de la práctica y los resultados.
No está falto de razón si afirmamos que la innovación se ha convertido el principal aspecto estratégico al que se enfrentan las organizaciones empresariales ya no solo que quieran liderar sus campos de actividad, sino que debemos añadir, que quieran sobrevivir a la turbulencia económica y social a la que nos enfrentamos.